.... Pero quizás la improvisación no exista, y sea simplemente insertar las mismas "viejas notas, ejercicios y técnicas musicales" y conceptos que se estudian durante semanas y semanas en los ensayos o en el silente estudio diario. La improvisación es un esfuerzo curioso, con una preparación estudiada, que toma riesgos, de mucha intuición. Necesita que cada músico previamente "prepare el escenario" para un "solo instrumental" exitoso. Un "solo" planificado y memorizado es aburrido y no está en el espíritu del momento musical. Y en la misma línea, un "solo" que no sigue ninguna regla, que ignore las "progresiones y escalas musicales", la forma, la armonía, el tiempo y a los otros intérpretes en el escenario, es tan poco musical y contraintuitivo para el espíritu del momento. El estudio profundo de la música, la práctica, la dedicación y la pasión por arriesgarse a transitar territorios creativos desconocidos, son el condimento que enriquece la improvisación.
Cuando se toca música de jazz, se establecen parámetros bien definidos, buscando en primer lugar un "guión" que nos ayude a la hora de dar un "toque" que suene a música de Jazz.
Cuando el sentido del ritmo aflora, el pié nos va guiando marcando el compás. (algo no muy académico, pero que aflora naturalmente de nuestra alma)
Normalmente las partituras están escritas en un compás 4/4, o con ritmo Jazz-Waltz de 3/4, y otras menos conocidas con compases de 5/4 y 7/4 usadas por músicos del cool-jazz como el pianista Dave Brubeck.-
Cuando saboreamos el swing, afloran los valores secretos de las corcheas, que con cada tiempo van trasmutando: una negra equivale a dos corcheas, las cuales tienen diferente valor: la primera de las corcheas vale el doble que la segunda.
La música de jazz tiene sabor de "síncopa", marcando los acentos en la corchea que antecede a los tiempos 1 y 3, produciendo un ritmo optimista y alegre.
La armonía tradicional del jazz usa la "tensión"; buscando de la escala la nota 1era, 3era, 5ta y 7ma que cuando forma el acorde le da "color" y sabor al jazz-
El bajo, o las voces graves tienen un gran desempeño en la interpretación de la música de jazz, y normalmente está marcando por las figura "negra", siempre buscando la nota "fundamental" de la escala, alternando con la 5ta en el tercer compás. El "Walking Bass", como bien lo dice la palabra, va marchando con el pulso de la figura "negra",
La improvisación es la esencia misma de la música de Jazz, pero para llegar a ese "estado" de creación musical se debe de tener una base sólida de conocimientos musicales y claras habilidades, dominando el gran mundo de las progresiones de acordes, arpegios, modos y escalas, ejercitar el virtuosismo al momento ejecutar cada instrumento, saber encontrar los patrones rítmicos justos, y valores de las notas, y un claro sentido del ritmo.
- "...La improvisación es un misterio. Se puede escribir un libro sobre el tema, pero al final nadie sabe qué es. Cuando improviso y estoy en buena forma, estoy como medio dormido. Hasta me olvido de que hay gente mirándome. Los grandes improvisadores son como sacerdotes: sólo piensan en su dios..."
Stéphane Grappelli
(1908/1997 - músico de origen francés - uno de los más destacados violinistas de jazz del siglo XX. Junto con el guitarrista de jazz Django Reinhardt, creó el Quinteto del Hot Club de Francia.) - "...La improvisación es la verdadera piedra de toque del ingenio..."
Molière
(1622/1673 - dramaturgo, humorista y comediante de origen francés, precursor de la Comédie Française) - "...Con frecuencia una alegría improvisada vale más que una tristeza cuya causa es verdadera. Sepamos, pues, improvisar nuestra alegría..."
René Descartes
(1596/1650 - filósofo, matemático y físico francés, estudioso de la geometría analítica y de la filosofía moderna)
* Improvisando con "best jazz musician" - Chick Corea