Cuando la armonía y sensibilidad se conjugan creando la música de una una gran compositora e intérprete del contrabajo.KURIKO TSUGAWA
New York City-based Jazz - bassist composer
Web Site http://www.kurikotsugawa.com
(Twitter @kurikotsugawa)
Nacida en Tokio (Japón), la señora Kuriko Tsugawa comenzó a ejecutar el contrabajo a la temprana edad de quince años. Poco después se unió a lo que se convertiría en su primera experiencia de grupo de jazz, la gran banda de Tomisato High School, cariñosamente conocida como "The Mad Hatters". Como miembro de "The Mad Hatters", tuvo la oportunidad de actuar en los festivales más importantes de Japón.
A Kuriko Tsugawa le estaba esperado el reconocimiento a la vuelta de la esquina, y fue así que en 1999 ella y sus compañeras de banda ganaron el primer premio del Student Jazz Festival que se celebra cada año en la Japan Association for Jazz Education. Durante tres años consecutivos, los "Sombrereros Locos" de Kuriko compartieron un proyecto con el artista visitante Monterey High School Big Band en un festival anual que se realizó en Tomisato, Japón. Estos enriquecedores encuentros anuales fueron la chispa que encendió la decisión apasionada de Kuriko de perseguir con la música de jazz en los Estados Unidos como profesional de la música. Después de graduarse de Tomisato High School, estudió en privado con Kazuteru Harada y Osamu Koichi durante un año, preparándose para seguir su sueño de estudiar jazz en los Estados Unidos. En 2001, audicionó para Berklee College of Music y ganó una beca para asistir a la universidad a partir de 2002. Ahora estaba a un paso más cercano de su gran sueño. Desde su llegada a Boston tuvo la oportunidad de estudiar con renombrados educadores de jazz como Hal Crook, Dave Santoro, John Lockwood, Ron Mahdi y Herb Pomeroy, y compartió escena con leyendas del jazz como Joe Lovano, George Garzone, Delfeayo Marsalis, Randy Brecker, el fundador de Yellow Jackets Russ Ferrante, Makoto Ozone y Danilo Perez. Además de sus muchos mentores inspiradores, Kuriko encontró en Boston una generación vibrante de músicos jóvenes de ideas afines que han sido tan cruciales para su desarrollo como cualquiera de sus profesores. Su tiempo en Boston le valió la pena, y sus rápidas mejoras y aprendizaje le condujeron a un calendario de actuaciones realmente ocupado. Además de la ciudad de Boston (como Wally's Jazz Café y Ryles Jazz Club), Kuriko actuó en una variedad de festivales alrededor del área de Nueva Inglaterra y en 2006 fue seleccionado como miembro de un cuarteto representando a Berklee en el Lucca Jazz Donna Festival en Italia. En el año 2006 también marcó el final de la era Bostoniana de Kuriko y vio el comienzo de una nueva, la que vino con un viaje a la ciudad de Nueva York. A las pocas semanas de llegar a Nueva York consigue con éxito un concierto estable en el Hotel Algonquin en Times Square. Desde entonces se ha vuelto cada vez más activa en la ferviente escena jazzística de Nueva York y sigue evolucionando día a día con la confianza y la pasión que se obtiene de que se hagan realidad sus sueños.
